Whitesnake "God to be bad"

Ha habido que esperar durante mucho tiempo, demasiado diría yo, para que se produjera el esperado regreso de la que sin duda ha sido y es una de las bandas más aclamadas de la historia del Rock americano, y es que quien más y quien menos, ha vibrado o encogido su corazón con algún tema de WHITESNAKE, banda liderada por el gran David Coverdale, una de las voces más reputadas y queridas del estilo.

Bien es cierto que equiparar este disco con sus primeros álbumes no sería justo, pero tampoco decir que no llega, porque se queda entre un gran disco y una obra de arte, y a estas alturas es bastante complicado. El caso es que tenemos once temas como los que disfrutar y lo demuestran nada más comenzar, con un buen tema rockero como "Best Years", dejando ver con claridad toda su grandeza en un inmenso "Can You Hear The Wind Blow", de esos cortes que resumen su potencial, Rock de categoría, con un Coverdale espectacular, poniendo el alma, y que en directo son de los que mueven a jóvenes y no tan jóvenes.

Es importante destacar, que como gran baza, el disco mantiene interés de principio a fin y no se pierde en un compendio de temas excusa, sino que merecen estar ahí, véanse el clásico "All For Love", qué melodía más maravillosa; para darnos de lleno con una bonita balada, "Summer Rain", agarrar de la mano a tu pareja y volar a las cotas más insospechadas del amor.

Pero aún así y con todo, debíamos dejar para el final un corte inmenso, de los que hacen que WHITESNAKE tenga el nombre que tiene: "All I Want All I Need" con Coverdale removiendo los tiempos de "Is This Love", esas guitarras sensuales, llenas de sentimiento que te inundan bajo una letra para aprender y cantar, destapan su corazón sin ningún tipo de complejo y recuerdan quienes son, con un estribillo donde la intensidad nos desborda y enamora, sumiéndonos en un amor eterno: su título lo dice todo "Tú eres todo lo que quiero, todo lo que necesito".

En pocas palabras, no será su mejor disco, algo normal teniendo en cuenta la sombra de la banda, pero sin duda alguna en 2008 WHITESNAKE vuelve a plantar sus letras en lo más alto del Rock, con un disco apasionante, muy rockero y lleno de esencia clásica; con un David Coverdale como genio y figura, con el único objetivo de volver hacernos disfrutar. Sin duda que lo ha conseguido.